(English translation available here)
Acabo de regresar de un viaje rápido a la Ciudad de México para visitar a familia y amigos. Probablemente éste no era el mejor momento para visitar la Ciudad de México dada la crisis epidemiológica actual. Sin embargo, tenía fuertes razones para no retrasar más esta visita: era ahora cuando había programado platicar con mi familia, la familia de mi esposa y algunos amigos, acerca de mi decisión de vivir tiempo completo como Dania.
Mi esposa y yo ya habíamos planeado la estrategia y el calendario en que le daríamos la noticia a nuestras familias. Sin embargo, el virus de la influenza se encargó de echarnos a perder nuestros planes. Aún así, fuimos capaces de reorganizarnos y hacer correr la noticia de este importante paso en mi transición.
En general, el resultado fue positivo. Recibí el apoyo de muchos amigos y (sorpresivamente) de la familia de mi esposa. Sin embargo, mi familia aún está en shock y negación. Me encantaría estar cerca de ellos para involucrarlos más con mi transición. Les va a tomar más tiempo del que suponía para que me ofrezcan su total apoyo y, a estas alturas, no estoy segura si serán meses o años lo que les tome para entender mi decisión. Aún así, sé que tengo que ser fuerte y luchar por mis sueños, a pesar de que esto no les guste a mis padres y hermanos.
Ahora estoy de regreso en Monterrey. Estoy contenta porque he dado un gran paso. Sin embargo, este no es momento de festejar. Tengo que continuar y prepararme para el siguiente paso: dar la noticia de mi transición en el trabajo. Estoy planeando dar este paso a mediados de Mayo. ¡Así que deséenme suerte y manténganse al tanto!
I just returned from a quick trip to visit relatives and friends in Mexico City. It probably wasn’t the best time to visit Mexico City given the current flu virus crisis. However, I had strong reasons not to delay this visit any longer: I programmed this visit to tell my family, my wife’s family, and some friends, about my decision of living full time as Dania.
My wife and I have planned the specific strategy and schedule to give the news to our families. Unfortunately, the flu virus managed to screw up all our plans. Still, we were able to reschedule most of our visits and spread the word about this important step in my transition.
In general, the outcome was positive. I received the support of friends and (surprisingly) my wife’s family. However, my family is still in shock and denial. I wish I could be closer to them and make them become more involved in my transition. It is going to take longer than I expected to them to offer me their full support and, at this point, I’m not sure if it will be months or years before they get to understand my decision. Still, I know I have to be strong and fight for my dreams, even if this doesn’t please my parents and siblings.
Now I’m back in Monterrey. I’m happy because I’ve given a huge step. However, this is not time to be cheerful. Instead, I have to continue and get ready for the next step: coming out at work. I’m scheduling it for mid May, so wish me luck and stay tuned!