México, tierra de víboras

Personas como la soprano Morgana Love o yo definitivamente podemos considerarnos privilegiadas, pues nuestra condición de mujeres trans no ha sido determinante en nuestra carrera profesional. Sin embargo, tampoco ha sido miel sobre hojuelas: ni nadie nos ha regalado nada del éxito profesional que hemos logrado y, más aún, nos hemos visto sujetas a un mayor escrutinio de nuestras capacidades en comparación a nuestros pares cisgénero.

Esto lo comenta Morgana en una entrevista que acabo de verle para Notimex, la cual comparto con ustedes. Si bien no entra en detalles (ni a mi me interesa hablar al respecto), deja en claro cómo es que somos permanente objeto de lo que coloquialmente se conoce como viboreo. Concuerdo con Morgana que para esos menesteres, pareciera que los Mexicanos se pintan sólos y, las personas trans, somos una presa fácil de las víboras. Por ello, una de las habilidades de superviviencia de las que debe preciarse toda mujer tras es la habilidad de crecer una piel muy gruesa, similar a la del rinoceronte, para poder sobrevivir tanto viboreo. Aquí les dejo la nota: